Amazing Stories en PDF

Hola amigos y aficionados del Pulp, hoy vuestra Web de género favorita os trae un tesoro que no tiene igual: las publicaciones originales de la prestigiosa revista Amazing Stories. Este es un esfuerzo de recopilación y de redacción con el que nos honra de nuevo Javier Sermanz.

Amazing Stories fue una revista pionera que sentó las bases de la Ciencia Ficción en la segunda década del Siglo XX. Su creador fue Hugo Gernsback, un inventor europeo trasladado a Estados Unidos en los años 20, que fundó más de medio centenar de publicaciones, entre ellas, Modern Electrics, la primera revista sobre electrónica.

En Abril de 1926, Gernsback comenzó a publicar Amazing Stories, la primera y más larga revista de lengua inglesa dedicada a aquello que entonces no se llamaba Ciencia-Ficción. La publicación proveyó un material exclusivo que Hugo fue el primero en denominar “Ficción-Científica”, un genero con que definiría, para bien o para mal, la época moderna; en cada número de Amazing Stories se incluía editoriales basados en la tecnología más puntera del momento. Gernsback ayudó a definir y poner en marcha un nuevo género de ficción Pulp.

Además, el catálogo de la revista incluía una extensa lista de ganadores de los Premios Hugo, un prestigioso concurso de Ciencia Ficción que recibió el nombre en su honor, por atribuírsele la invención de dicho término; genialidades de la talla de H.G. Wells, Philip K. Dick, J.G. Ballard, Ursula Le Guin, Arthur C. Clarke, y cientos de escritores menos reconocidos. La revista se desarrolló lentamente, sus espeluznantes portadas asombraron a los lectores, pero en los primeros años predominó un material pre-impreso (manuscrito original sin revisar ni editar para la publicación) y Gernsback se ganó reputación de tacaño, de no pagar bien a sus escritores ni de darles un buen trato.

En 1929 Hugo se declaró en bancarrota y vendió la revista para dedicarse a otras actividades sin demasiado éxito. Amazing Stories pasó por una serie de editores y contenidos hasta que al final sucumbió en 2005, después de casi ochenta años de publicación.

En los años 30, Amazing Stories, a pesar de no ser considerada de mucha calidad en los círculos de Ciencia Ficción, adquirió notable éxito. Sus sorprendentes portadas pusieron el listón muy alto para el resto de revistas Pulp y Cómics, especialmente en los 50. Después del 55, el año del primer Premio Hugo, la revista alcanzó su pico con el editor Cele Goldsmith, hasta que lo dejó en el año 59. Sus diseños eran más del tipo de las películas de Serie B que las anteriores. Amazing Stories adquirió un nuevo nivel de lujo y sofisticación; publicó a escritores más literarios, como es el caso de la edición del año 59, que publicó una novela de Robert Boch.

Esta tendencia continuó en los setenta, con una novela de corta de Gordon Eklung y un relato de un joven R.R. Martín (Juego de tronos). En 1982 la revista se vendió y no volvió a tener la predominancia que había tenido hasta entonces, aunque siguió publicando a grandes escritores.

Ahora, mirando en retrospectiva, pese a que fue por muchos vilipendiada, vemos a Amazing Stories como una cápsula del tiempo de la Ciencia Ficción, que caracterizó a lo largo del tiempo la historia del género, incluso si su contenido tendía más a la aventura para jóvenes que a una ficción seria para adultos. Según el novelista Brian Adliss, Hugo Gernsback fue lo peor que le había pasado a la Ciencia Ficción. Pero en definitiva fue un visionario, con alarmantes predicciones que se cumplieron, como la invención de las Redes Wi-Fi, la Televisión o el Tráfico aéreo, un futurista que contribuyó a una nueva forma de escribir. El célebre escritor Ray Bradbury dijo que Amazing Stories les hizo amar el futuro.

Historias Pulp os ofrece una selección de revistas de Amazing Stories en formato original para que las descargues en PDF y las disfrutes con total plenitud, asombrándote como se debieron asombrar aquellos lectores de la revista durante décadas. Haremos actualizaciones con nuevos números de esta increíble publicación cada mes, así que estaos al quite y no dejéis de seguirnos. ¡No lo dejéis pasar!